El Parlamento Europeo aprobó hoy una resolución en la que exige al Gobierno de Hugo Chávez que ponga fin a las listas de inhabilitaciones electorales, puesto que amenazan los derechos civiles y políticos de los opositores al actual Ejecutivo venezolano. Los diputados también reclaman a Chávez que fomente una democracia más participativa en Venezuela, respetando plenamente la Constitución de 1999. Además, rechazan tajantemente la expulsión de activistas defensores de los derechos humanos.
La resolución, presentada por los grupos PPE-DE, ALDE y Unión por la Europa de las Naciones, fue aprobada por 51 votos a favor, uno en contra y ninguna abstención. El texto subraya que las autoridades venezolanas han utilizado listas de ciudadanos para cesar a funcionarios públicos, privar a los ciudadanos de su derecho a ocupar cargos públicos e impedirles el beneficio de servicios y trámites administrativos. Según los diputados, estas listas amenazan los derechos civiles y políticos de los opositores al actual Gobierno venezolano, y en particular el derecho a ser elegido y elegir a las autoridades locales, regionales y nacionales (considerandos A y B).
Por eso, el Parlamento Europeo manifiesta su preocupación por la lista de inhabilitaciones electorales presentada por el Contralor General de la República y recuerda al Gobierno venezolano que dichas inhabilitaciones no respetan los artículos 42 y 65 de la Constitución venezolana, que reconocen únicamente esta facultad al poder judicial, "como suele ser habitual en cualquier Estado de Derecho" (§ 1 y 2).
Los eurodiputados también al Gobierno de Hugo Chávez que ponga fin a estas prácticas y que fomente una democracia más participativa en Venezuela, respetando plenamente los principios establecidos en la Constitución de 1999 (§ 6).
El gabinete de Chávez también debe cumplir los acuerdos internacionales firmados y ratificados por Venezuela, como la Convención Americana de Derechos Humanos, con relación a los derechos políticos contenidos en los artículos 23.1b y 23.2, y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos en sus artículos 2 y 25 (§ 3).
Expulsión de activistas y asesinato de Julio Soto
Por otra parte, la Eurocámara rechaza tajantemente el acoso y la expulsión arbitraria de los activistas defensores de los derechos humanos y considera que estas expulsiones "supone un precedente muy grave en cuanto al riesgo que representa para el ejercicio de la libertad de expresión y el derecho de crítica consustanciales a toda sociedad democrática" (§ 4).
En este sentido, el pleno del PE critica a las autoridades venezolanas por haber expulsado al director de la ONG Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, y al subdirector de la organización, Daniel Wilkinson, por la presentación de un informe crítico sobre las libertades públicas y el respeto a los derechos humanos durante los diez años de mandato del presidente Hugo Chávez (considerando D).
Asimismo, los parlamentarios condenan enérgicamente el asesinato del líder estudiantil Julio Soto y manifiestan su condolencia a los familiares y allegados de la víctima. También solicitan a las autoridades venezolanas que hagan todos los esfuerzos necesarios para esclarecer a la mayor brevedad posible este crimen, de forma que los autores y los responsables del mismo sean llevados ante la justicia y para que dicho crimen no quede impune (§ 5).
Debate
José RIBEIRO E CASTRO (PPE-DE, Portugal), lamentó que Venezuela, un pueblo con profundos sentimientos democrático, viviera desde hace años esta horrible situación donde se violan los derechos fundamentales. Condenó las listas de inhabilitados políticos como algo inaceptable en una democracia, propio únicamente de las sociedades totalitarias. "Hay numerosos ciudadanos que no pueden presentarse a las elecciones, y a eso hay que sumarle la inaceptable expulsión de defensores de la libertad de expresión del país. Condenamos también el asesinato del líder de estudiantes, que murió como consecuencia del clima tenso que se alimenta desde el gobierno", dijo. También insistió en que Europa no debía cerrar los ojos ante esta situación: "No lo haríamos si ocurriera en nuestro país, y no podemos bajarnos los pantalones como ha hecho Portugal, mi país. La Comisión debe ser mas firme en las críticas a Venezuela".
Ewa TOMASZEWSKA (UEN, Polonia) expresó su malestar por las extrañas circunstancias de la muerte de Julio Soto: "hay que esclarecer lo que ocurrió, enviamos desde aquí el pésame a su familia y exigimos la búsqueda de los responsables y el castigo para los culpables"; También crítico el hecho de que a human rights se le impida actuar en la práctica. "En Venezuela debe haber libertad de expresión y de asociación, así como igualdad de género, y las elecciones deben ser democráticas", dijo, " Venezuela debe volver a ser una democracia donde puedan vivir todos"
Renate WEBER (ALDE, Rumania) consideró que la situación de la oposición hacía anos que era muy complicada y que el estado de derecho del país era de broma. Insistió en que solo los tribunales podían decidir y castigar crímenes graves con inhabilitaciones, y que no era casualidad que esto ocurriera cuando los defensores de derechos humanos critican al gobierno. Añadió que el Parlamento Europeo debe enviar mensaje muy claro a Venezuela y a sus ciudadanos, pues las inhabilitaciones van en contra del estado de derecho.
El eurodiputado Bernd POSSELT (PPE-DE, Alemania), señalo que el asesinato de Soto era sólo el punto álgido de una serie de infracciones en país que durante muchos años había tenido un papel muy positivo en Latinoamérica: "Ahora, sin embargo, los derechos se pisotean y un dictador intenta imponer su terror en todo el continente y mas allá, estableciendo relaciones con Bielorrusia". Consideró que Europa debía hacer todo lo posible, porque nunca se puede permitir que alguien ataque a su pueblo y a otros, y trate de aterrizar al mundo con la cuestión del petróleo: "Esto va mas allá de la soberanía nacional, se trata de la defensa de los derechos humanos universales".
Marios MATSAKIS (ALDE, Chipre), recordó que si Venezuela estaba hoy como estaba era más debido a factores exógenos que endógenos. Aun así, quien sufre siempre es el pueblo civil: "Que Chávez tenga algo contra EEUU y sus aliados no debe llevar a injusticias con su pueblo. Si quiere que su país avance, su gobierno debe funcionar dentro de la democracia, utilizar violencia contra su propio pueblo sólo llevqá a un mayor sufrimiento".
Leopold Józef RUTOWICZ (UEN, Polonia), repitió que había que defender las libertades individuales en Venezuela y comparó la situación del país con la de Cuba: "existe una polarización de las fuerzas políticas, hay grandes diferencias en la distribución de la riqueza y el grupo mas activo de Chávez, con control del ejercito, hacen que el sistema social se dirija hacia Cuba y eso daría como resultado incluso un cambio en himno y bandera". Recalcó que eso estaba ocurriendo ante nuestros ojos y que había que hacer algo.
Pedro GUERREIRO (GUE/NGL, Portugal), por su parte, criticó fuertemente la resolución como un ejemplo más de interferencia en un Estado soberano. Además, ironizó sobre el hecho de que Europa quisiera darle lecciones de democracia a Venezuela cuando ellos mismos no eran capaces de respetar las decisiones democráticamente tomadas en Francia, Holanda o irlanda sobre el tratado de Lisboa. Para él, es un error meterse en aquello que solo compete al pueblo venezolano y consideró que lo que realmente incomodaba al parlamento era "el ejemplo de un pueblo que molesta a los principales intereses económicos de la Unión y el ejemplo de la lucha antiimperialista".
Urszula KRUPA (IND/DEM, Polonia) recordó que el hecho de que el gobierno rechazara observadores internacionales para las próximas elecciones regionales y locales, en noviembre, muestra ya una falta de democracia. Pero destacó que eso no sólo ocurre en Venezuela, si no en múltiples países, y que incluso en Europa, esa falta de democracia la estaban denunciado muchos Iglesias que no se ven respetadas.
El comisario de energía, el letón Andris PIEBALGS, prometió que la Comisión seguiría atentamente la situación en Venezuela y la preparación para las próximas elecciones. Recordó que en los últimos años habían tenido lugar varios procesos democráticos en el país y que los observadores habían concluido que se cumplían con la legislación nacional e internacional, pero que era sospechoso que en el último referéndum los observadores ya no fueron invitados. Se hizo eco de la preocupación existente entre los europarlamentarios sobre la inconstitucionalidad de las inhabilitaciones, y deseo que en las próximas elecciones se reforzase la democracia en Venezuela para que todos los actores puedan participar en respeto. Declaró también su esperanza en que Venezuela repensara la decisión de la expulsión de los activistas de la organización por los derechos humanos porque la libertad de expresión es el núcleo del estado de derecho. Repitió que seguirán la situación y que respaldarán el desarrollo de la democracia, lo que se reflejará en sus políticas y en sus relaciones con Venezuela.
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