Trabajadores de CVG Bauxilum levantaron su voz de protesta este miércoles por la práctica del “quita y pon” que -aseguran- ha implementado el Ejecutivo, a través del Mibam, a la hora de realizar los cambios gerenciales en la industria, sin tomar en cuenta la “urgente” necesidad de fijar un rumbo a puerto seguro, en razón de la crisis operativa que atraviesa esta factoría.
El ex militar Héctor Herrera Jiménez, quien había sido designado presidente de Bauxilum hace escasos 13 días, fue dado de baja el martes. El vicepresidente de CVG, Alfredo Arcila, asumió este miércoles la dirección provisional de la empresa, prometiendo continuar la búsqueda de recursos para el pago de los pasivos laborales e inversiones.
La conflictividad estaba sobre la mesa, y así lo percibieron los trabajadores y dirigentes sindicales de CVG Bauxilum, donde se produjo la noche del martes un "repentino" cambio del presidente Héctor Herrera Jiménez, quien no cumplió siquiera 13 días al frente de la misma.
A las 6:00 de la mañana de este miércoles, empleados -adscritos al grupo de 7:00 a 3:00 de la tarde- procedieron a trancar la avenida Fuerzas Armadas en la Zona industrial Matanzas, obstaculizando no sólo el ingreso a la factoría sino a otras industrias cuyo acceso principal está ubicado en esta vía. Carros, autobuses y hasta gandolas fueron colocados en uno de los canales que conduce a la entra de Orinoco Iron, Venprecar y Venalum. La protesta tenía como objetivo enviar un mensaje de rechazo al alto gobierno por las "improvisaciones" gerenciales que se ponen en evidencia con la salida de Herrera Jiménez, quien hace 13 días fue designado presidente de Bauxilum.
Cabe recordar que el ex militar presidía el Frente Cívico Militar Bolivariano y además disputó la nominación del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) a la Gobernación del estado Bolívar.
No a la irresponsabilidad
El secretario general del Sindicato Único de Profesionales de CVG Bauxilum (Suprobaux), Antonio Rivas, rechazó las improvisaciones del Ministerio de Industrias Básicas y Minería (Mibam) al momento de designar y destituir a los presidentes de las empresas del aluminio. "Situaciones como éstas demuestran que los altos funcionarios del Mibam y de la CVG no tienen una visión estratégica de lo que representa el sector del aluminio para el desarrollo del país", dijo Rivas.
Comentó no entender la política de este gobierno cuando en menos de seis meses han cambiado a dos presidentes (Carlos Acosta Pérez y Héctor Herrera Jiménez). "Nuestra empresa requiere con urgencia una política estable y coherente que permita revertir la tendencia en sus niveles de producción e iniciar sus procesos de recuperación".
Explicó que con la presencia de Jiménez se lograron conseguir 73 millardos de bolívares a fin de cancelar los pasivos laborales y activar las inversiones tecnológicas. "Pero a las 5:00 de la tarde (de este martes) nos llamó a reunión para informarnos que el ministro Sanz le había pedido la renuncia al cargo, alegando presiones políticas", explicó.
Quejas
Los trabajadores se quejan de estos "quita y pon" de presidentes, porque Bauxilum es el primer eslabón para la producción de aluminio, es decir, que de verse afectada ésta, el resto de las industrias, Venalum, Alcasa y Carbonorca, saldrían perjudicadas. No cuentan con suficiente stock para garantizar la alúmina a las reductoras del aluminio (Alcasa y Venalum) pero los dirigentes sindicales aseguran que no levantarán la protesta hasta tanto el alto gobierno "practique una misma política".
Edgar Valentine, secretario general del Sindicato de Trabajadores de CVG Bauxilum Los Pijiguaos (Sintrabauxilum) emplazó al Mibam a colocar personal que conozca la realidad de las compañías y que termine de profundizar el plan de trabajo en función del desarrollo de la región y de la estabilidad laboral de más de 3 mil personas. "Esto no se trata de una mesa de trabajo, de vamos a ver si nos dan o nos regalan. Esto se trata de beneficios que se deben y que deben cumplirse. Los trabajadores necesitan una fecha de pago de los pasivos y de las inversiones para mantener a la empresa", dijo Valentine.
Los empleados y dirigentes sindicales comentaron que el nombre que "sonó" antes de que decidieran colocar al vicepresidente de la CVG fue el ex ministro del Trabajo, José Ramón Rivero.
Piden "tiempo"
Pasadas la 1:00 de la tarde, el viceministro de Industrias Básicas y Minería (Mibam), Jesús Paredes, acompañado por el ex presidente de Bauxilum y ahora titular de Venalum, Carlos Acosta Pérez, conversaron con los trabajadores y pidieron "tiempo" para conformar mesas de trabajo y otorgar soluciones. Los trabajadores rechazaron esta propuesta y aseguraron que las operaciones de Bauxilum están en contingencia y que seguirán así hasta tanto no se fije una fecha de pago de inversiones y pasivos laborales, sino "difícilmente nos iremos de aquí".
El presidente de Venalum, Carlos Acosta Pérez, reconoció "que sin Bauxilum no hay nada", así como aclaró que ningún efectivo de la Guardia Nacional visitaría la protesta, "que es pacífica". El viceministro Paredes dijo que el motivo de la protesta tenía la legitimidad, pues "desde hace años está el problema, pero el Presidente de la República está asumiendo esta situación". "Los reales que ustedes vienen pidiendo desde hace tiempo son ciertos, justos y verdaderos", reconoció Paredes, "pero no ha sido reconocido con la velocidad que merece", prosiguió.
Finalmente, trabajadores pidieron la palabra para conversar. Uno de ellos solicitó formalmente al viceministro, tras señalar que haría un enlace con el vicepresidente de la República, Ramón Carrizalez, informar al presidente que "no queremos al ministro Rodolfo Sanz, por irresponsable, queremos su cabeza", al tiempo que lo invitó a realizar un Aló Presidente desde Bauxilum.
En manos de Chávez
El presidente encargado de CVG Bauxilum, Alfredo Arcila, se reunió con el cuerpo gerencial de la empresa, señalando la necesidad de depurar las finanzas para avanzar en el proceso productivo. En cuanto a las acciones de protesta, Arcila destacó que "nosotros respetamos el derecho de los trabajadores a sus reclamos; es legítimo ese planteamiento lo que en justicia se les debe, nosotros no asumiremos posturas demagógicas ni irresponsabilidades con ofrecimientos fuera de la realidad, ya que la solución a sus reclamos está en manos de la Presidencia de la República".
Anoche, a las 9:00, los trabajadores de Bauxilum conjuntamente con los dirigentes sindicales permanecían en las afueras de la industria con la avenida trancada. Su promesa de que si no hay respuesta no se mueven, se estaba cumpliendo a cabalidad.
Tras la petición de más tiempo de los directivos de la CVG "para conversar con Sanz y el presidente Chávez", los trabajadores consideraron aplicar el plan B. Seguir laborando con un equipo de contingencia que la empresa y el gremio sindical acordaron y que prácticamente deja a la industria con los servicios mínimos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario