Los valores políticos más importantes alcanzados por el pueblo venezolano en toda su historia han sido la independencia y la democracia

Los valores políticos más importantes alcanzados por el pueblo venezolano en toda su historia han sido la independencia y la democracia. A la primera llegamos temprano, en comparación con otros pueblos, pero a la democracia -como proceso- llegamos tarde, a partir del 23 de enero de 1958, pues bien si los gobiernos de Medina y López Contreras fueron democráticos, en comparación con sus antecesores y en el trienio de octubre de 1945 se convocó la Asamblea Constituyente que inició el camino para la elección popular, universal, directa y secreta que eligió a Rómulo Gallegos, la democracia como proceso se inicia a partir del 23 de enero de 1958.
Como tantas veces lo denunciamos públicamente en artículos de prensa, charlas y conferencias, tuvimos entonces una democracia centralista. De allí que planteáramos, repetidas veces que, o la democracia acababa con el centralismo o el centralismo acabaría con la democracia. Ahora nos encontramos en un régimen político de origen electoral, pero con una marcada vocación centralista y autoritaria, que pretende subordinar el resto de las instituciones a un modelo de país que evidentemente no es democrático. De allí que el actual gobierno abortara el proceso de reforma del Estado y que la descentralización la considere un desorden y no un mecanismo que estimula la participación ciudadana, la desconcetración del poder y la mejor distribución social del ingreso fiscal.