03 febrero 2008

CAMPAÑA DE CALUMNIAS CONTRA VENEZUELA

PRELUDIO DE UNA INVASION COLOMBIANA APADRINADA POR ESTADOS UNIDOS?

Se trata de una vieja artimaña utilizada por toda potencia extranjera invasora. Antes de eliminar físicamente a su enemigo, se tienen que 'ganar las mentes y los corazones' de su propia opinión publica, de sus cómplices (en este caso Colombia, su liderazgo y sus fuerzas armadas fuertemente equipadas con dólares norteamericanos) y de los propios invadidos, para legitimar y facilitar la agresión.

Por Jesus Nery Barrios

La campaña ya lleva 9 años y esta llegando a su penúltima etapa, individualizándose en el liderazgo político venezolano, anunciando una inminente invasión militar de Colombia sobre territorio venezolano, orquestada y financiada por los Estados Unidos de America con un único objetivo: el petróleo venezolano que se haya bajo el estado Zulia, gobernado por el dirigente opositor Manuel Rosales, aliado declarado de los neoconservadores dirigidos por la familia Bush y las grandes empresas petroleras (Exxon Mobil y Conoco Philips, que quieren revancha por haber sido sacadas de la Faja del Orinoco), traidor a su patria y quien ha proporcionado toda la logística necesaria para sembrar de paramilitares (oportunamente desmovilizados el año 2006) a toda la entidad bajo su cargo y también para su traslado a puntos estratégicos y vitales para la seguridad nacional.

Esta brutal campaña para el lavado de cerebro de millones de personas en todo el mundo ya se utilizo con gran eficacia en Afganistán en contra de Al-Qaeda y Osama Bin Laden y de Saddam Hussein y el liderazgo del Partido Baath Árabe Socialista, en el poder en Irak desde los años 50 del siglo pasado. En el caso de Afganistán la trama estaba conectada con el 'atentado' a las Torres Gemelas perpetrado por el mismo gobierno de Bush para generar la justificación necesaria para la invasión, mientras que la de Irak lo estaba con las 'armas de destrucción masiva', cuentos chinos que incluso muchísimos 'bolivarianos' creen hasta hoy día.

Todos recuerdan las viejas fotos y videos de Bin Laden y sus edecanes escondidos en sus cuevas 'planificando' los ataques, distribuidos a todas las policías del mundo junto con la respectiva carga de estiércol sobre sus personas para pintarlos como monstruos peludos y malolientes que solo abrigaban odio en sus corazones y, por lo tanto, merecían ser perseguidos y aniquilados a costa de lo que fuera.

también hay que resaltar las fotos de los ministros de Hussein y la de el mismo enmarcada en unos naipes en los que se escribía su nombre, cargo, características físicas y la recompensa ofrecida por Estados Unidos por aportar datos sobre sus paraderos, una vez consumada la invasión y ellos se hallaban escondidos o huyendo.

En el caso venezolano es Colombia la escogida por los neoconservadores petroleros en el poder en los Estados Unidos (sin importar quien ocupe la Casa Blanca) para que les haga el trabajo sucio pues se hallan estancados en Irak y Afganistán y la cosa se pone peluda en Irán y Pakistán, así como también dentro de su propio país, atrapado en una recesión económica mas que evidente y que sus perros mediáticos (CNN y Fox News) ya no pueden tapar; dándole los últimos toques a su maquinaria bélica largamente equipada y entrenada por ellos justamente para este momento en que nos encontramos: una crisis económica global y con las reservas petroleras mundiales agotándose aceleradamente.

Es precisamente desde los medios de difamación colombianos de donde proviene la despiadada avalancha de calumnias contra el gobierno y los lideres políticos venezolanos destinada a desprestigiarlos mundialmente hasta el punto de convertirlos en monstruos asquerosos que merecen ser borrados de la faz de la Tierra, en donde los herederos de la Nueva Granada, autonombrados y pintados como los buenos de la película, sean los héroes predestinados a librar al mundo de semejante 'plaga'. A Irak también le sembraron personas y cosas en su territorio para incriminarlo. A Afganistán también lo difamaron públicamente denunciando a los talibanes como intervencionistas que se entrometían en los asuntos internos de sus países vecinos, promoviendo el terrorismo, traficando con armas, drogas, humanos, etc., etc., hasta que, finalmente, sobrevinieron las invasiones y el genocidio mas grande (hasta ahora) que haya conocido la humanidad.

Pero la tarea no esta completa. Todavía hay países en este mundo esperando ser invadidos por los Estados Unidos de America, y el factor común que los une es el petróleo, el agua, el uranio y demás recursos naturales estratégicos que poseen. Ahora le toca el turno a Venezuela, mañana serán Bolivia y Nigeria. Los venezolanos que a lo largo de los años ignoraron aquellas campañas y los destinos de aquellos pueblos por indiferencia, racismo o apatía ahora vivirán en carne propia el ser victimas del descrédito, ser señalados con el dedo por una 'opinión publica' mundial manipulada y controlada mentalmente por los medios de comunicación corporativos capitalistas, que ya nos acusa de 'narcotraficantes', 'terroristas', 'drogadictos', 'comunistas', tal y como lo hicieron y lo siguen haciendo con Cuba, Indonesia, Afganistán, Irak, Palestina y la misma Colombia.

Tal vez si en el pasado hubiéramos sido mas solidarios con esas causas hubiéramos aprendido mas de sus ejemplos históricos y hoy en día tendríamos la moral suficiente para pedirles a los pueblos del mundo que no crean todas las calumnias que se están divulgando sobre los venezolanos y sus lideres democráticamente electos. Si lo hubiéramos hecho a tiempo tal vez no estaríamos tan solos como ya lo están los palestinos, cubanos, iraquíes, afganos que han muerto y seguirán muriendo mientras el mundo entero sigue con sus patéticas y decadentes vidas consumistas, como si nada estuviera pasando.

La única forma de desactivar permanentemente todas las amenazas bélicas y ambientales que actualmente acechan al mundo es activando el internacionalismo proletario que no solo promueva la lucha solidaria concreta por Venezuela, sino la de los venezolanos por todas las causas obreras del mundo, pues solo los obreros (quienes al fin y al cabo son los que generan la riqueza) podrán salvar a la clase obrera, la mayoría que habita este atribulado planeta.

Jesus Nery Barrios
chuchonery@gmail.com

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